domingo, 14 de abril de 2013

F.A.Q. sobre Monarquía y República




(Este F.A.Q. fue publicado el 14/04/2013 y retocado ligeramente el 15/06/2014 añadiendo algunas frases.)

¿Qué diferencia hay entre Monarquía y República?

Actualmente y en nuestro entorno europeo, la diferencia es que en la Monarquía el Jefe del Estado adquiere su rango o cargo de forma hereditaria y vitalicia, mientras que en la República es elegido y para un periodo concreto.

¿Para qué sirve un rey o un Presidente de República?

Su labor es de carácter formal y preventivo, sirviendo de garantía para que el gobierno de turno respete el sistema político vigente, que está basado en una Constitución elaborada por los políticos que han sido elegidos por el pueblo y aprobada en referéndum por la ciudadanía. Ni el rey ni el presidente de la República podrían tomar decisiones sin contar con el aval del Gobierno o del Parlamento. También les competen las tareas de la más alta representación diplomática del Estado, como una especie de embajador supremo. 
Lo más importante es que, en el plano legislativo, el rey o reina y el presidente o presidenta de la República no tienen voz ni voto, y se limitan a firmar las leyes que elabora el parlamento o los decretos que promulga el Gobierno.


¿Es mejor Monarquía o República?

Para responder a esta cuestión objetivamente, una manera puede ser detenerse a examinar los países de nuestro entorno para ver qué tienen y cómo les va. 

En la Europa actual, tienen régimen monárquico la mayoría de los países más prósperos y avanzados, tanto en lo económico como en lo social, como son Noruega, Suecia, Dinamarca, Holanda, Bélgica, Luxemburgo, Liechtenstein, Mónaco y Gran Bretaña. Por el contrario, tienen régimen republicano los más atrasados en lo económico y social, como Grecia, Portugal, Rumanía, Albania, Chipre, Bulgaria, etc. Aunque también hay repúblicas que marchan bien, como Alemania, Francia y Finlandia. Pero lo cierto es que en Europa sólo hay un país monárquico que marcha mal y es España. Así que  la culpa no habría que echársela a la Monarquía sino a los españoles y españolas, porque resulta evidente que, salvo la excepción de España, en Europa hay gran correlación entre prosperidad y Monarquía.

También podemos abordar esta cuestión con perspectiva histórica. Desde el punto de vista histórico, no puede probarse que sea preferible la República específicamente para nuestro país. Sin entrar a realizar valoraciones ni hipótesis causales, si nos atenemos a los hechos acaecidos la última vez que hubo un régimen republicano éste duró muy poco y desembocó en la sangrienta Guerra Civil, dejando al país arrasado en todos los sentidos durante varias décadas.


¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes de la Monarquía?

En la Monarquía, el Jefe del Estado es educado desde niño para realizar esta función. En todos los oficios se considera una ventaja o mérito el haber comenzado a aprenderlo y practicarlo desde pequeño. Le salieron los dientes en la peluquería se dice para ensalzar a un peluquero que aprendió el oficio de su padre. Y si el padre lo aprendió del abuelo, más mérito todavía. En este punto conviene recordar que Urdangarín no pertenece a la monarquía y, por tanto, no ha sido educado desde niño para ejercer el papel que el destino le deparó con su matrimonio. En general, quien da un braguetazo ya se sabe lo que busca y cuáles son sus prioridades.

También puede ser una ventaja el hecho de que esta gente de sangre azul se sabe mover como pez en el agua en las altas esferas internacionales. Incluso aprenden el idioma inglés desde pequeños, cosa que no puede decirse de ningún Presidente de Gobierno español: ni González, ni Aznar, ni Zapatero ni Rajoy. Por tanto, pueden mediar con gobernantes de otros países para obtener beneficios para su propio país, por ejemplo, para que el rey de Arabia Saudí compre trenes Talgo y empresas españolas hagan la línea del AVE a La Meca. 

Recordemos que los presidentes de Gobierno que hemos tenido, al moverse en estas altas esferas no han sido capaces de hacer otra cosa que no sea el ridículo (Zapatero) o resultar manipulados para ser utilizados (Aznar) o dedicarse a comprar los trenes del AVE a la alemana Siemens despreciando los españoles de Talgo (Felipe González). Después de la orgía compradora que tuvo González con la Siemens, despreciando los productos españoles que sin embargo eran comprados por otros países porque los españoles eran mejores, apareció un alemán diciendo que la Siemens había dado sobres con millones de marcos alemanes, o sea, sobornos de corrupción, tanto al PSOE como a Felipe González, en lo que se llamó el caso Flick. Esto de los sobres que está ahora tan de moda se viene arrastrando desde 1984 con Felipe González

Quien formule la cuestión sobre si el rey cobra o no comisiones por estas mediaciones, debe tener en cuenta también si los políticos las cobran o no, comenzando por los concejales de los pueblecitos y subiendo hasta llegar a los presidentes autonómicos pasando por todos los demás. Y no sólo comisiones por contratos muy beneficiosos para el Estado, sino también por otros no tan beneficiosos, como aeropuertos sin aviones, autopistas sin vehículos, centros culturales sin visitantes o sin terminar, vías de AVE sin pasajeros o destrozar el medio ambiente con urbanismo salvaje.

En cuanto a los inconvenientes de la Monarquía, el principal quizás sea que el cargo es vitalicio, de manera que hay que tener siempre al mismo rey durante toda su vida guste o no guste, salvo que fuese manifiestamente incapaz para realizar su cometido y entonces sería depuesto, o que el propio monarca decidiese abdicar.


¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes de la República?

En la República, el presidente o Jefe del Estado es elegido por el pueblo para un mandato temporal, que suele ser de 4 o 5 años, aunque podría renovarse por más periodos. En cualquier caso, existe la ventaja de que no hay obligación de tenerlo durante toda su vida, salvo que el pueblo lo vaya respaldando siempre y él se quiera seguir presentando.

El mero hecho de que al presidente republicano lo elija el pueblo, no puede decirse que sea ventaja ni tampoco inconveniente. Al elegirlo el pueblo, el elegido será alguien sectario y por tanto, sea como sea y haga lo que haga, tendrá el respaldo incondicional de los varios millones de esclavos de su secta, mientras que tendrá en contra a los varios millones de esclavos sectarios del bando contrario. De todas formas, en circunstancias normales no tiene que hacer nada más que firmar las leyes que elaboren los políticos, además de las tareas formales y protocolarias  de representación del Estado.



¿Qué cambiaría si actualmente España fuese una República?

Si hoy España fuese una República lo que cambiaría sería la persona que ejerciese la Jefatura del Estado. El Presidente de la República española con mucha probabilidad podría ser Aznar, tanto si es elegido directamente por el pueblo como si lo es indirectamente a través del Parlamento, ya que el pueblo español ha respaldado al PP para que tenga mayoría absoluta y Aznar es el rey en ese partido y le gusta mucho figurar. Y en el caso improbable de que no fuese Aznar, podrían haber sido Rodrigo Rato, Esperanza Aguirre, o cualquier otro que tuviese notable poder dentro del Partido Popular, como por ejemplo Bárcenas antes de saltar el escándalo de los sobres, ahora no que ya está quemado. Para cambiar de presidente, habría que esperar a las próximas elecciones generales o a sucesivas hasta que el PP perdiese su mayoría, y entonces el presidente de la República podría ser Felipe González, Zapatero, Bono, Fernández de la Vega, Alfonso Guerra, Chávez, etc.


¿Es la República la solución?

En la dramática situación actual de nuestro país, hay que buscar soluciones efectivas, y el hecho de que haya rey o presidente de República no influye en que el país vaya a estar mejor o peor gobernado. Pongamos el ejemplo de un enfermo de cáncer de pulmón, que al conocer su diagnóstico sólo toma una medida: cambiar de marca de champú. Es posible que el cabello se le quede más lustroso, pero su grave enfermedad no se va a curar si no toma las medidas pertinentes para ello.

Los políticos son quienes tienen el poder para hacer las leyes, mientras que el rey o el presidente de la República no intervienen excepto para firmar dichas leyes cuando ya están terminadas y aprobadas por el Parlamento. A estos políticos que hacen las leyes los elige el pueblo a través de las urnas. Por tanto, el poder lo tiene el pueblo y la responsabilidad es en última instancia del pueblo



¿Por qué hay quienes ponen la solución de los graves problemas del país en el cambio de Monarquía a República?

RAZÓN A) Revanchismo guerracivilista

Muchos sectarios de izquierda identifican la República con la izquierda, debido a que en el inicio de la Guerra Civil el bando que defendía el régimen vigente de la República era el mismo que el izquierdista. Esto fue a consecuencia de que el bando golpista que atacó al régimen legal republicano fue el bando fundamentalista-católico fascista, o de derechas, por lo cual la situación quedó polarizada entre sectarios de izquierda socialistas/comunistas que defendían la República y sectarios de derecha fundamentalistas-católicos que defendían el Fascismo. Por tanto, algunos izquierdistas creen que el desmantelamiento de la Monarquía y la instauración de la República supondría la revancha o el triunfo final de su secta, que fue derrotada en la guerra, pero esto es un error porque su bando contrario no era el monárquico, sino el fundamentalista-católico fascista.

La realidad es que la guerra no fue entre República contra Monarquía, sino entre República contra Fascismo. Cuando estalló la Guerra Civil, la Monarquía había dejado de existir años antes y el ex-rey Alfonso XIII vivía fuera de España. Por eso, al terminar la contienda se estableció el régimen fundamentalista-católico fascista del vencedor, hasta que el militar que ganó la guerra falleció después de 40 años. Entonces se restauró la Monarquía parlamentaria, que era el régimen que había anterior a la República, pues precisamente fue la República la que dio paso a la guerra Civil, y no la Monarquía.  Tanto los sectarios del bando perdedor como los del ganador se han dedicado a inculcar sus ideas políticas radicales y revanchistas a sus hijos y nietos, y por eso actualmente hay mucha gente joven que tienen la misma mentalidad de sus abuelos a este respecto, de manera que se prolonga la contienda ad infinitum. Cabezas viejas sobre hombros nuevos, que diría A. Neill.

Así pues, esta reivindicación de la República sería en el fondo un afán de proseguir la contienda guerracivilista hasta restablecer la legalidad que fue violada por el golpe de Franco. Sectarios radicales de izquierda sólo ven que Franco nombró sucesor en la Jefatura del Estado al actual rey, pero no quieren ver que, una vez fallecido el dictador, el rey promovió el desmantelamiento del régimen totalitario de Franco y su sustitución por la Democracia. Si hubiesen sido los izquierdistas quienes hubiesen liquidado el régimen de Franco, ahora habría una República  (no sabemos si democrática o totalitaria), pero como fue principalmente el monarca quien liquidó el régimen fascista, ahora hay una Monarquía parlamentaria. Es así de sencillo, y podría decirse que quien derrotó a Franco o al franquismo fue Juan Carlos, y no los republicanos ni izquierdistas. Desde luego, el pueblo español no fue quien derrotó a Franco, ya que en vida del dictador la oposición al franquismo era pequeña en comparación con el apoyo, que era mayoritario. 

Siempre existió una minoría de desafectos al régimen, lógicamente se trataba sobre todo (aunque no exclusivamente) de socialistas, comunistas y anarquistas que habían combatido en el bando de la República, y de sus familiares. Pero la realidad es que, en vida de Franco, cada español era un pequeño Franco, salvo excepciones. En general los padres eran dictadores represores y violentos con sus hijos, los profesores eran dictadores represores y violentos con su alumnado, los policías eran dictadores represores y violentos con el pueblo humilde, etc, casi todo el mundo era un pequeño facha o un gran facha. A partir de que el rey Juan Carlos eliminó el régimen franquista y lo sustituyó por la Democracia constitucional, todo el mundo se convirtió de la noche a la mañana en un demócrata de toda la vida. Los profesores de mi instituto más represivos, totalitarios y violentos, los principales agentes represores al servicio del director ultrafranquista, sus mayores lameculos, se convirtieron en un pis-pás en socialistas y comunistas "de toda la vida" y ocuparon puestos directivos en los PSOE (había dos) y el PC.

En España esto fue lo que ocurrió, pero en términos globales la República no puede identificarse con la secta de izquierda ni con la de derecha. En USA, el partido llamado Republicano es de derecha radical y engloba a los ultras del Tea Party. 


RAZÓN B) Independentismo y totalitarismo fascista o comunista

Tampoco gusta el régimen monárquico a los a los fascistas ni a los comunistas. El rey es símbolo de la permanencia del Estado y la garantía última de salvaguarda del sistema democrático, aunque sea una Democracia imperfecta como la nuestra. Por tanto, la monarquía estorba a quienes preferirían que existiese un régimen de dictadura con supresión de Derechos Humanos fundamentales recogidos en la actual Constitución, como el de reunión, asociación, libertad de pensamiento y de expresión, etc. Es lógico, por tanto, que la actual Constitución monárquica fuese rechazada por los partidos comunistas, fascistas y pro-terroristas, como así ocurrió. Los resultados globales del referéndum de 1978 fueron de un apabullante 88,5 % a favor de la monarquía parlamentaria constitucional, mientras que en contra los radicales comunistas, fascistas y filoterroristas sólo sumaron un exiguo 7,9 %.

El rey es jefe supremo de las fuerzas armadas y ha sido educado desde pequeño para ese papel, mientras que el ejército está adiestrado en el respeto absoluto a la jerarquía de mando. El actual príncipe ingresó en el ejército cuando era casi un niño, y fue haciendo su particular mili durante varios años por tierra, mar y aire. Esta íntima imbricación con el ejército que tiene un rey no la puede tener un político cualquiera, y por tanto la existencia de un rey puede proporcionar mayor garantía de estabilidad del sistema político constitucional en casos extremos, y representar un obstáculo insalvable para quienes pudieran aspirar a erradicar el sistema democrático y sustituirlo por la dictadura de partido único, ya sea fascista o comunista.

El rey es también simbolo y garantía de la unidad territorial del Estado, y por esto la Monarquía no gusta a los nacionalistas radicales que tienen la pretensión de independizar a unos territorios del Estado, en contra de la unidad indisoluble que está proclamada en la Constitución y tiene como garante último al ejército y a su jefe supremo, el rey.


RAZÓN C) Ignorancia o irreflexión

Una tercera razón que puede explicar por qué algunos ponen la solución de la España actual en la reinstauración de la República es simplemente la ignorancia. No son capaces de distinguir entre Monarquía absoluta y Monarquía parlamentaria constitucional. Actualmente no existe en Europa la Monarquía absoluta, en la cual el rey tenía la potestad de redactar leyes. Por el contrario, en las monarquías europeas contemporáneas el rey o reina se limitan a firmar las leyes que le entregan ya debatidas y redactadas el Parlamento y el Gobierno. La responsabilidad recae en los políticos que hacen las leyes en representación de los ciudadanos que les han dado su voto en las urnas. Por tanto, en última instancia la responsabilidad es del pueblo que elige a esos políticos concretos. El rey no tiene absolutamente ninguna responsabilidad, es quizás de los ciudadanos españoles que menos culpa tiene, ya que por norma nunca vota en las elecciones.


RAZÓN D) Excesivo gasto

La cuarta razón es de tipo económico. Puede resultar inconveniente que el rey tenga asignados unos emolumentos demasiado altos, y más aún si en la nómina se incluye a los empleados de su Casa Real y a todos los miembros de su familia. Tampoco es admisible la opacidad respecto de su patrimonio ni los privilegios fiscales si los tuviera. Estos inconvenientes se resuelven fácilmente estableciendo por Ley la transparencia absoluta sobre este tema, anulando los privilegios fiscales, y recortando la asignación al monarca y eliminando la de toda su familia, a excepción del heredero de la corona.


RAZÓN E) Identificación Monarquía-Iglesia

Hay quien identifica a la Monarquía con la religión del Estado, pero lo cierto es que siempre que existe una religión mayoritaria en un país se produce la identificación o imbricación entre esa religión y el Estado, con independencia de que sea Monarquía o República. Lo que en España y Bélgica ocurre con respecto a la Iglesia católica, es lo mismo que pasa en Italia e Irlanda, que son repúblicas íntimamente unidas a la iglesia católica, puesto que católica es la gran mayoría de la población de estos cuatro países. Grecia, que es una república, va más lejos ya que tiene como religión oficial la ortodoxa. Recordemos que España no tiene ninguna religión oficial, sino que la Constitución proclama un Estado aconfesional aunque actualmente más del 70% de la población son católicos, de los cuales la mitad de ellos sólo participan en los oficios religiosos de compromiso familiar, como bodas y entierros. 

Si España hoy fuese una República, el Presidente de la República sería alguna figura destacada del PP que también tuviese vínculos con alguna organización fundamentalista católica, como el Opus Dei, etc.

RAZÓN F) Sentimentalismo

A esta postura podemos llamarla sentimental ya que se basa simplemente en el sentimiento de que alguien elegido por el pueblo resulta más cercano o más legítimo que alguien impuesto por mera sucesión familiar. Sobre esta motivación no hay nada que objetar, salvo que se trata de algo que procede únicamente de los sentimientos y no específicamente de la razón. Como hemos visto, no hay argumentos racionales para priorizar la República frente a la Monarquía parlamentaria. 



¿Se puede resolver el dilema Monarquía/República?

El problema político de España no es el rey, que ni pincha ni corta y se limita a figurar. El problema político está causado por los propios políticos y sindicalistas, y estos son elegidos por el pueblo, por tanto el problema de España es el propio pueblo español, que está atrasado evolutivamente dos o tres siglos con respecto a los otros pueblos europeos que también tienen Monarquía y son muy prósperos: Finlandia, Dinamarca, Holanda, Gran Bretaña, etc. El pseudoproblema Monarquía/República no hay que resolverlo sino disolverlo, ya que no es una cuestión prioritaria para los intereses actuales del pueblo español.  

Lo que principalmente necesita España no es erradicar la Monarquía sino erradicar el sectarismo irracional de votantes zombis; erradicar del gobierno en todas las administraciones a quienes sean ladrones y mentirosos compulsivos y a quienes carecen de empatía con quienes sufren; erradicar el espíritu de rebaño de la población que necesita de pastores que los guíen, ya sean pastores religiosos o mediáticos. Lo que necesita España es erradicar el odio patológico, que se manifiesta en votar en contra del partido odiado sin importar ninguna otra consideración, y se manifiesta en el salvajismo hacia los animales, disfrutando haciendo espectáculos con la tortura cruel y desalmada.

En una palabra, lo que necesita España es Ilustración, que es lo que hubo hace 2 y 3 siglos en los países europeos que hoy son potencias económicas, sociales y culturales. Y en este sentido, el movimiento revolucionario de indignados #15M lleva realizando una importante labor desde hace dos años.

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